Jorge Moragas diputado del PP en el Congreso ha calificado hoy la obra de Miquel Barceló, inaugurada ayer para la sede de la ONU en Ginebra, como “gotelé millonario” y ha criticado el que 500.000 euros de los ocho millones que ha aportado España para decorarla proceden de Fondos de Ayuda al Desarrollo (FAD).
Estas declaraciones de un servidor público, evidencian que el gasto en cuestiones culturales así como educativas en España, no se practica y está mal visto; así nos luce el pelo. Este señor debería recordar las enormes cantidades de dinero y ayudas europeas para España, gastadas en inmoralidades como seguir pagando el PER, subvenciones al lino y un bochornoso etcétera.
Pero además de esta postura cateta, retrógrada y desvergonzada, se añade el desprecio hacia la figura del artista y del creador en general en nuestro país, considerados gente rara y que quieren ganar dinero sin trabajar. La referencia al “gotelé millonario” incide en la facilidad del español medio en poder realizar obras de Arte, quien no ha oído la frase “esto lo hace un niño”; pues a pintar señor Moragas, quizás ganaría mucho dinero como un artista tan cotizado como Barceló, y con suerte, lo perderíamos de vista en el servicio público.
No creáis que el PSOE se sale de rositas en este tema. ¿Ha sido competitivo el concurso de adjudicación de la obra?, ¿dónde está el gasto en promocionar a los artistas jóvenes, facultades de BBAA, y proyectos artísticos innovadores?, pero sobre todo, debería de haber utilizado una mayor cantidad de dinero privado en vez de gastar dinero de la partida del FAD. En esta última cuestión de la intervención privada, debemos recordar que este sector español sólo se preocupa básicamente por la compra de Arte para el pago de impuestos, favores o conseguir desgravaciones fiscales.
Afortunadamente y siguiendo la cita famosa de Hipócrates “Ars longa vita brevis”, la obra de Miquel Barceló perdurará en el tiempo e impondrá su calidad artística.